jueves, 28 de agosto de 2008

CAPÍTULO 3. INTERACCIÓN DOCENTE-ALUMNO

Díaz Castañeda Rodolfo (2007). ENSEÑAR INVESTIGANDO
Un principio de didáctica para un nuevo rol docente. Editorial Lulu Interpress


En este capítulo se visualiza el papel tanto del alumno como del docente. “En el desarrollo de una metodología de investigación en el aula intervienen una serie de elementos básicos: el alumno, como protagonista del aprendizaje. El docente, como coordinador y facilitador del aprendizaje. El contexto en que se produce el proceso, constituido por un entramado de elementos, entre los que pueden destacarse, entre otros, los materiales didácticos, los aspectos organizativos y el clima del aula”.

El docente se vuelve un promotor de la investigación en el aula incurriendo principalmente en eliminar el bloqueo inicial para el aprender de sus alumnos, volviéndose así el alumno protagonista del aprendizaje en medida en que construye su conocimiento, atribuyendo el sentido y significado a los contenidos de la enseñanza. Para que el aprendizaje sea realmente significativo el alumno debe cumplir con las siguientes condiciones que deben ser lógicas, psicológicas y en tiempo y energía.

Se debe propiciar un ambiente de trabajo adecuado para favorecer actitudes activas en los alumnos, que no solo estimulen la participación.

Una característica primordial dentro de un nuevo proceso educativo, es la interacción entre docente y alumno, la cual logra una óptima conexión que permite desarrollar actividades propias de la educación principalmente la investigación.

Considero la lectura un buen material para iniciarse dentro de un papel de docente, más efectivo y actualizado de la práctica de la docencia, ya que en el presente han cambiado las concepciones y condiciones del ser humano envueltas en la modernidad y el surgimiento de nuevas tecnologías. Antes un maestro y autoridades dedicadas a la educación podían conformarse con implementar el sistema tradicionalista, pero después de varias aportaciones que documentan que el nuevo rol docente favorece más al alumno, es esencial que se tomen cartas en el asunto y aunque sea complejo inclinarse de una buena vez a desarrolla esta propuesta.

CAPÍTULO 2. ¿POR QUÉ ENSEÑAR-INVESTIGANDO DESDE EL AULA?

Díaz Castañeda Rodolfo (2007). ENSEÑAR INVESTIGANDO
Un principio de didáctica para un nuevo rol docente. Editorial Lulu Interpress


En este apartado Díaz Castaneña nos contextualiza en la identificación de problemas en un simple entorno donde continuamente presenta situaciones que nos llevan a una solución por medio de un proceso, el cual se desglosa por tratar, enfrentar y trabajar con los problemas; así el autor aborda en gran medida sobre como el alumno llega a un resultado factible con base a una metodología.

Para construir el conocimiento el autor recurre al aprendizaje opuesto al tradicional, el aprendizaje memorístico, opta por un aprendizaje significativo, enfocado al constructivismo, donde el alumno se enfrenta a un problema con las condiciones que tiene en este momento, elaborando estrategias para su actuación que casi siempre son las idóneas. Por lo tanto el tratamiento de problemas propicia el aprendizaje significativo a medida que facilita que se pongan a prueba las concepciones del alumno en determinada situación o problema.

Posibilita que la interacción se reestructure con las concepciones del alumno, favoreciendo la reflexión sobre las estrategias que se utilizaron para el aprendizaje, evaluación y resultados obtenidos.

Para que exista una buena investigación del alumno primero debe existir una buena investigación en el aula enfocando los procesos de enseñanza-aprendizaje: reconoce la actitud exploradora y curiosa del aprendizaje humano compatible con la concepción constructivista, realizando aportaciones psicológicas, fomentando la autonomía y creatividad, y las metodologías son consideradas como activas.

“El aprendizaje debe ser funcional para el individuo, es decir el conocimiento adquirido debe poder ser utilizado por el alumno ante distintas situaciones, permitiéndole, a la vez, comprender e intervenir mejor en la realidad en que vive”, una finalidad de la que el docente no puede prescindir.

El autor estimula a la exploración del entorno con el fin de visitar otros espacios de interés a la generación del conocimiento fuera del aula. Un aspecto para que los alumnos realicen el proceso de aprender a aprender es motivarlos.

Finalmente el alumno puede realizar una reflexión de su propio proceso de aprendizaje, es decir meta-aprendizaje, valorando las estrategias utilizadas en la resolución de problemas desarrollando como anteriormente se comenta el aprender a aprender.

Para las conclusiones de este capítulo, Díaz Castañeda nos presenta diferentes problemáticas en nuestro entorno, las cuales son solucionadas por medio de estrategias implementadas por el alumno, utilizando herramientas que no solo puedan estar dentro del aula, sino en espacios alternativos para la resolución de los problemas, los cuales pueden ser sumados tanto individual como grupalmente.

CAPÍTULO 1. NECESIDAD DE UN NUEVO ROL DOCENTE

Díaz Castañeda Rodolfo (2007). ENSEÑAR INVESTIGANDO
Un principio de didáctica para un nuevo rol docente. Editorial Lulu Interpress



Este capítulo expone un nuevo rol docente, en el que se pretende dejar atrás el papel desacertado y tradicionalista del proceso de educativo que se ha empleado hasta la fecha, por tanto se intenta una transformación de la enseñanza.

El nuevo rol docente prescribe una interacción necesaria entre maestro y alumno, siempre dentro de una concepción constructivista del aprendizaje, donde el maestro propicie en el alumno la investigación desde el aula, en vez de vaciarle únicamente teorías sin oportunidad de experimentar con la práctica.

“Según la perspectiva constructivista, la comunicación educativa constituye el proceso mediante el cual se estructura la personalidad del alumno. El proceso de aprendizaje no es reducible a un esquema mecánico de comunicación… por cuanto el educando reelabora los mensajes según sus propios esquemas cognitivos”. Comunicación, concepto importante e indispensable dentro de este proceso, ya que el lenguaje acompañado con un mensaje e intención en este caso con fines didácticos, es la función básica del docente junto con otros recursos educativos y un medio ambiente para efectuar el proceso de enseñanza, como comunicador que investiga desde el aula.

Díaz Casteñeda comenta que el educador debe estar actualizado en conocimientos, métodos y formas de comunicación, como medios tecnológicos educativos apropiados que garanticen un adecuado desarrollo del proceso educativo.

Además el nuevo docente “debe influir en ámbitos del diseño, desarrollo y evaluación curricular”, así como también basarse en una “metodología basada en la investigación, que caracteriza, un modelo didáctico, es decir, un marco teórico para interpretar cómo es y cómo funciona la realidad escolar, que proporciona, al
mismo tiempo, pautas y orientaciones para intervenir en dicha realidad”, esto para ofrecer una variedad de posibilidades y vías de actuación.

El autor propone que los docentes adopten un nuevo rol para implementar en las aulas, ya que deja atrás un modelo tradicional para abrir un nuevo sistema del aprendizaje, donde el alumno no solo es un receptor, si no que actualmente existe una interacción, cabe mencionar desde la comunicación y la perspectiva educativa esta nueva práctica va a revolucionar a las siguientes generaciones de docentes y por tanto de alumnos.

Considero que es un valioso planteamiento, ya que de esta manera el alumno garantiza su aprendizaje, por el hecho de construir su propio conocimiento a partir de la investigación y la práctica fundamentada y guiada por teorías.